El teletrabajo se ha convertido en una modalidad cada vez más común, brindando a los empleados la posibilidad de trabajar desde casa u otros lugares fuera de la oficina tradicional. Sin embargo, el trabajo remoto también implica nuevos desafíos en términos de seguridad digital. Para proteger la información sensible de la empresa y mantener la integridad de los sistemas, es fundamental que los empleados conozcan y apliquen una serie de medidas de seguridad en su entorno de teletrabajo:

Uso de redes seguras

Evitar las redes Wi-Fi Públicas: Una de las primeras recomendaciones para los empleados en teletrabajo es evitar conectarse a redes Wi-Fi públicas, como las de cafeterías o aeropuertos, ya que suelen ser menos seguras y están expuestas a posibles ataques de ciberdelincuentes. En caso de ser necesario utilizar estas redes, se debe hacer siempre a través de una VPN (Red Privada Virtual).

Fortalecer la red doméstica: Los empleados deben configurar sus redes Wi-Fi domésticas con contraseñas seguras y complejas, y cambiar la configuración de fábrica de sus routers. Es recomendable, además, actualizar el firmware del router para evitar vulnerabilidades.

Uso de VPN para acceso seguro

Una VPN crea una conexión cifrada entre el dispositivo del empleado y la red de la empresa, protegiendo así los datos que se transmiten y minimizando el riesgo de interceptación. Muchas empresas ya ofrecen una VPN corporativa a sus trabajadores remotos, que debe utilizarse siempre que se acceda a la información de la organización.

Protección de los dispositivos

Instalar antivirus y antimalware: Es esencial que todos los dispositivos utilizados para el trabajo remoto, como laptops y teléfonos, cuenten con un software antivirus y antimalware actualizado, que pueda detectar y eliminar amenazas potenciales.

Activar el cortafuegos: El firewall o cortafuegos actúa como una barrera que bloquea accesos no autorizados al dispositivo y protege frente a posibles ataques externos.

Actualizar el software: Los empleados deben asegurarse de mantener actualizados tanto el sistema operativo como todas las aplicaciones que utilizan para el trabajo, ya que las actualizaciones suelen incluir parches de seguridad que corrigen vulnerabilidades detectadas.

Uso de contraseñas seguras y autenticación en dos pasos

Contraseñas complejas y únicas: Es fundamental que los empleados utilicen contraseñas complejas (una combinación de letras, números y caracteres especiales) y diferentes para cada cuenta. Una buena práctica es utilizar un administrador de contraseñas que permita gestionarlas de forma segura.

Autenticación en dos factores: La autenticación en dos factores añade una capa adicional de seguridad, ya que, además de la contraseña, requiere una segunda verificación (como un código enviado al móvil) para acceder a las cuentas. Este método reduce significativamente el riesgo de accesos no autorizados.

Acceso seguro a las aplicaciones y archivos de la empresa

Control de acceso y permisos: Los empleados deben utilizar únicamente aquellas aplicaciones y sistemas de la empresa para los que tengan autorización. Las empresas pueden implementar controles de acceso para que cada empleado solo tenga acceso a la información que necesita para desempeñar sus tareas.

Uso de espacios de almacenamiento seguros: Las plataformas de almacenamiento en la nube seguras son una excelente opción para el teletrabajo, ya que permiten almacenar y compartir archivos de forma segura. Es recomendable evitar el uso de dispositivos USB o de almacenamiento externo no cifrados para transferir información sensible.

Separación entre el entorno personal y el entorno laboral

Es recomendable que los empleados dispongan de un equipo de trabajo exclusivo para sus tareas laborales y no lo utilicen para actividades personales. En caso de que deban compartir el dispositivo, deben crear diferentes perfiles de usuario para garantizar que las aplicaciones y archivos personales no interfieran con los de trabajo.

Conocimiento de los protocolos de seguridad de la empresa

Los empleados deben estar informados sobre las políticas de seguridad de la empresa, incluyendo qué procedimientos seguir en caso de detectar alguna amenaza o violación de seguridad. Este conocimiento permite que los empleados actúen con rapidez y eficacia en caso de emergencia, reduciendo los riesgos para la organización.

Bloqueo de dispositivos y entornos físicos seguros

Los empleados deben bloquear sus dispositivos cuando no los están utilizando, especialmente si trabajan en espacios compartidos con otras personas. Además, es aconsejable que, de ser posible, mantengan sus entornos de trabajo en lugares seguros y privados, minimizando así la exposición de pantallas o documentos en áreas públicas o abiertas.

En definitiva, con la implementación de estas medidas de seguridad los empleados pueden contribuir de forma proactiva a reducir los riesgos de seguridad y ayudar a prevenir posibles ataques. La clave está en combinar la tecnología adecuada con buenas prácticas de seguridad y en mantener siempre una actitud preventiva frente a posibles amenazas

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